III ÉPOCA. ERASMUS+ IPEP JAÉN. 'Motivación en educación de adultos'. Por Juan Claudio Perabá.


Suponer que un adulto hace las cosas porque las elige libremente o por motivación personal es mucho suponer. En concreto, muchos de nuestros alumnos están “obligados” a obtener títulos si quieren ascender, aumentar sus sueldos o acceder a trabajos diferentes a los que tienen actualmente. 



Esto no es necesariamente motivante, suponiendo una carga más a añadir al día a día. Es parecido si se piensa, al caso de los adolescentes, que están obligados a cursar unas materias determinados años, y con determinados horarios, a una edad en la que el cuerpo les pide otras cosas, en su mayoría. Si para estos se dedica un tiempo, un personal y unos recursos ingentes en buscar metodologías, materiales, estrategias, etc… que se ajusten a sus intereses, que sean lúdicos, “gamificación” se llama ahora,…  ¿cuál es la razón para no hacerlo de la misma manera con los mayores de edad?



Si se trata de que haya que “dar” un temario en tiempo insuficiente como para “florituras” docentes, tenemos un problema grande que deriva en absentismo o abandono, de los que tenemos altas tasas ahora mismo. Es normal ver a un alumno/a que acude el primer día a clase presencial y comprueba que lo que se hace se parece mucho al instituto “convencional” del que proviene y en el que no pudo alcanzar los objetivos, y no vuelve. O el que descubre que hay deberes al uso, esos que por lo que sea no hizo en su día, y que ahora, por mucho que quiera no puede realizar por falta de tiempo, por ejemplo.

Lo menos que podemos hacer los profesionales de la docencia es hacérselo lo más llevadero posible y la administración, replantarse el sistema en muchos aspectos. Dándole la vuelta a la tortilla seguramente tendríamos más matriculaciones (el boca a boca funciona de maravilla) y menores tasas de abandono.


Repensando las prácticas educativas para adultos, estudiantes penitenciario y menores infractores.


 Ahora viene lo complicado; ¿cómo?. Hay cosas que funcionan sí o sí. Como ejemplo tenemos herramientas tipo “KAHOOT” que incluyen el uso de tecnologías de la información y la comunicación (TICS), es decir, un móvil, ordenador, tablet,… Esto lo he probado con adultos y funciona igual que con adolescentes: piques, motivación, diversión, “vamos a hacerlo otra vez, profesor”,… y … aprendizaje.

Bueno, los profesionales del tema ya nos buscamos la vida en ese aspecto. Ahora, nos vamos a Florencia una semana (10-14/4/2023), a realizar este curso: Designing Inclusive Learning Environments (ILE) to Support all Students (DILEs)”Esperamos mucho del mismo y poder aplicar lo aprendido en nuestras clases.

¡Ya os contaremos a la vuelta, un abrazo!









Un par de reflexiones ya metidos en harina, a la mitad de la semana:


‘El curso nos está sorprendiendo, creíamos que lo habíamos oído todo sobre corrientes, herramientas y tendencias educativas y Maddalena Bucciarelli, psicóloga experimentada en mil batallas, como ella misma nos cuenta, nos demuestra que no.


Nos descubre un sin fin de recursos y aplicaciones que podemos realmente llevar al aula y que, sobre el papel, creemos que son efectivas.


El resto de compañeros del curso (todos españoles, en total somos 5) no hacen sino aportar continuamente más experiencias con lo que se está conformando un "tutti frutti" del que estamos extrayendo muchísimo jugo. A tres días de la clausura, ya ha valido la pena en muchos aspectos que ya os relataremos.’


Juan Claudio Perabá.

Soraya Fernádez Pegalajar.

  


 

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